Es un proyecto ideado por un grupo de jóvenes argentinos, que planean comercializarlo en 2020. Cómo funciona
Son millennials, tienen entre 24 y 28 años, y comparten un proyecto. Todo comenzó cuando Facundo Noya (25), en 2016, estaba en un hospital en Concordia, Entre Ríos. Su padre estaba internado y compartía habitación con una paciente diabética que había ingresado por una lesión en uno de sus pies. Tenía una chinche desde hacía varios días y no lo había notado.
A la mujer tuvieron que amputarle el miembro inferior. Y Noya, ingeniero biomédico, se sensibilizó ante esa problemática, conocida entre personas con diabetes, y decidió hacer algo. Se preguntaba cómo una lesión tan sencilla podría terminar en una amputación y qué podría hacer para evitarla.
Plantillas Ebers: 15 sensores que detectan lesiones en personas con diabetes
Así nació la idea de Ebers, una plantilla con 15 sensores (en un principio eran 21) que puede medir variables en la persona con diabetes, detectando posibles lesiones. Es una forma de prevenir una amputación.
Cómo funciona
La plantilla funciona a través de sensores resistivos con nanopartículas de plata, que miden temperatura, humedad y presión. Al detectar una anomalía, envía por Bluetooth una notificación al smartphone u otro dispositivo con una determinada app instalada.
"Le avisa al paciente que algo está andando mal con su pie, en la pisada, y también puede sincronizarse con la nube, y esos datos pasárselos al médico, que esté siguiendo el caso de ese paciente", señaló a Infobae Bernardo Villares, diseñador industrial, quien forma parte del equipo de Ebers.
"La aplicación almacena los datos, y toma un registro a lo largo del tiempo, de la pisada, del patrón normal de la persona que padece de diabetes", agregó.
El joven explicó que la tecnología usada para el desarrollo de los sensores de la plantilla no es nueva. "Pero la aplicación es bastante novedosa, sobre todo por los materiales. El advenimiento de nanomateriales nos ha dado algunas ventajas, sobre todo en la conductividad, en la aprestación de los sensores", aclaró.
La plantilla monitorea de manera continua la marcha del paciente, y si detecta una anomalía, la reporta. Se sincroniza con una plataforma, para que el médico pueda seguir la patología.
"Como todo producto médico, el desarrollo es largo. Pensamos llegar con el producto al mercado en octubre del 2020. Eso quiere decir que, a mediados del año que viene, estaremos iniciando el protocolo clínico para homologarlo. Eso lo vamos a hacer con el equipo del Hospital Italiano y del Rawson, en Córdoba", aseguró Villares.
Según expresó a Infobae, el producto valdría USD 60 "más una suscripción mensual de USD12, para tener acceso a la plataforma, y a la aplicación".
Y enfatizó: "Lo más importante es la aplicación, que se conecta con la plantilla, la aplicación es la que navega entre los algoritmos y detecta el riesgo. A su vez, es la plataforma la que almacena toda esa información y pone a disposición toda esa información al equipo médico".